THE DARK SIDE OF THE MOON
EMI CAPITOL 1972
Para muchos la verdadera obra maestra de Pink Floyd, (aunque muchos se inclinen-incluido este escribano-por el fantastico The Piper at the gates of dawn de 1967) Pink Floyd aqui dio el salto al vacio de los muchos a lo largo de una carrera en la cual se hicieron notar por arriesgar mas de lo debido, apostando por sonoridades de vanguardia pero con un instinto por la melodicidad, tan carente en muchos de los nacientes grupos de rock progresivo en los cuales la ampulosidad, los excesos musicales eran la marca de fabrica, quizas como unos sucesores de las ondas beatleras pero solo cosechando lo que los de Liverpool sembraron en su momento.
Al contrario de grabaciones atascadisimas de años anteriores como el estupendo Ummagumma, la suite sideral Atom Heart Mother o ese intento hermoso como lo fueron las bandas sonoras de Zabriskie Point y La Valle (Obscured by clouds) la perfeccion instrumental de Echoes (el cual contenia una cancion tan cuidadosamente elaborada como lo es la que le da titulo al album) aqui se ve magnificada pero con sutiles detalles para dejar como legado un disco asombroso de principio a fin.
Las grabaciones del album las hicieron en los estudios Abbey Road y aqui colaboro el inge Alan Parsons el cual cobro una infima cantidad de lo que cobraban los productores de ese entonces (el se atribuye la seccion de efectos sonoros en ese viaje delirante que es On the run) tiempo despues haria musica que mucho le debe al Pink Floyd del Dark Side...con su proyecto Alan Parsons Project con verdaderos portentos musicales como lo son Eyes in the sky y la majestuosa Time (nada que ver con la Time del disco reseñado)
La portada del album (una de las 10 mejores en toda la historia del rock) es un esfuerzo de Hipgnosis (Storm Thorgerson y Aubrey Powell) por hacer un diseño sencillo y a la vez contundente, segun se sabe la banda vio varios diseños (entre los cuales habia desde dibujos a mano y arcoiris hechos con spray sobre mantas) y la decision la tomaron en pocos segundos, el titulo hace referencia a las ondas que afectan el subconsciente como la muerte, la vejez, el dinero, la locura, temas recurrentes en la discografia pinkfloydiana, segun se sabe tambien el titulo estuvo a punto de no utilizarlo la banda ya que la desconocidisima agrupacion Medicine Head iba a sacar un disco con el mismo titulo, al ver que el esfuerzo de esa banda nunca se cristalizo lo volvieron a retomar (se sabe que el titulo alterno del disco era Eclipse)
El album comienza con unos latidos de corazon los cuales van entremezclandose con grabaciones incidentales que hizo el Roger Waters con la gente que laboraba en Abbey Road y los mismos musicos de sesion (Waters sacaba tarjetas con preguntas al azar, la gente respondia y el grababa la respuesta, se dice que hasta invito a Paul Mc Cartney pero la grabacion a el se le hizo un poco fuera de contexto ya que el citado era una celebridad) sonidos electronicos y las voces de las coristas de varios temas de este disco, el primer tema es Breathe y es una tonada tranquila, eterea , la voz de Gilmour se acopla muy bien y mas esos delays de guitarra que se pasean en toda la cancion, la bateria jazzeada se escucha estupenda, despues le sigue On the run, una especie de tema electronico que lleva sonidos pulsantes y amenazadores, gritos,risas diabolicas y pisadas de gente corriendo (obra de Parsons) el final se diluye entre gritos y una subita explosion que da paso a unos relojes (prueba estereofonica atribuida a Parsons para probrar equipo nuevo de EMI) para sumergirse en Time, bateria de entrada loopeada, guitarra y sintetizador para dar paso a un rock potente que se descolla en uno de los solos mas estrujantes en la historia del rock, las voces de las coristas se agrupan de esplendorosa manera con Waters y Gilmour, le sigue otra version de Breathe llamada Reprise (Sargento Pimienta dixit) despues le sigue quizas a mi gusto la mejor pieza de todo el album , The great gig in the sky que inicia con un piano melancolico y sube de intensidad por medio de un organo Farfisa y un Wurlitzer y la voz celestialmente diabolica de la cantante de sesion Clare Torry (que años despues colaboro con la misma cancion-con permiso de Rick Wright que es el compositor de ese tema-para anunciar pastillas para el dolor de cabeza de la marca Neurofen) .
El segundo lado abre con la comercialmente esplendorosa Money que abre con el sonoro rugir de cajas registradoras (obra de Parsons y Waters en un cut and paste primitivo y efectivo) y se desenvuelve en una maraña de funk, rock (el saxofonista Dick Parry se avienta el mas temeroso solo de sax en este disco casi entrando en los terrenos del free jazz) una chingonsisima cancion, despues la subita calma con Us and them, con un piano hermosisimo obra de Wright (en Live at Pompei se ve armando el solo de piano) aqui Parry ejecuta con una ternura que raya en lo poetico unas notas para sax que nada tienen que ver con el estruendo del tema anterior, le sigue Any colour you like (inspirado en un comercial de la Ford donde podias pedir un auto de cualquier color que te guste mientras sea negro) sintetizador y guitarra en un efectivo tema de transision para dar paso al otro punto alto del album, la impactante Brain Damage (con dedicatoria para Barret) que comienza con un riff de guitarra y se envuelve en capas de guitarras, teclados y risas pregrabadas para dar por terminado el album con el cierre final en la majestuosa Eclipse donde a manera de lista se engloban todos los temas del album para cerrar con una caricia sonora (los latidos del inicio) y las palabras de Jerry Driscoll (el portero de Abbey Road) recitando las siguientes ondas cosmicas "el lado obscuro de la luna no existe...de hecho esta toda obscura".
El final final rememora lo hecho en A day in the life , si se ponen buzos escuchen la seccion de cuerdas tocando Ticket to ride, el alucine total.
El principio del fin del periodo dorado Pink Floyd.
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