Tame Impala
The Slow Rush
Si usted buscaba rock and roll en este disco, mejor aléjese de aquí, lo que hace la mente maestra de Tame Impala (mejor dicho, Kevin Parker ES Tame Impala) es un dechado de orfebrería con sonidos sintetizados para estar literalmente en el viaje, sonidos dulces y francamente pop con armonías bien elaboradas, melodías entrañables y un sentido por la bisutería sonora, quizás lo mas cercano a una guitarra sea uno de los tracks finales del disco, un disco que se puede oír en una sentada si es muy fan acérrimo de esta banda, por mas que quieran colgarle la medalla de que son evocativos al Pink Floyd sesentero lamento decirles que no, quizás y solo un poco al PF de Endless River o The Division Bell, eso si, si se ponen al tiro varias de estas canciones traen dos que tres ganchos pop que no quedarían nada mal en anuncios de tv.
Están advertidos
Chaf E. Kelly.
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